ARISTA.


____El mundo siempre es mas de lo que queremos y esperamos, la creatividad es un ascensor al éxito, la aprobación de lo que es bien recibido por otros es un punto clave para salir a la luz como buen historiador, el estilo de escritura que se ve en esta narrativa es de estilo (Manga Japones) espero sea de su agrado, Arista es una historia planteada en un mundo de fantasía el cual no tiene una definición remota de tiempo, se trata de seres similares a Dioses, que ejercen su poder en el mundo entere, quienes son alabados por los seres humanos, hasta que dicha historia dio un giro tremendo al nacer el personaje estelar de la historia, espero sea de su agrado y puedan relacionarse con mis personajes.

 Arista

Capitulo 1: El inicio del mundo.


Alguna vez en un tiempo jamás descrito en una tierra jamás reconocida como real, existió un organizado grupo de seres perfectos los cuales nombrados como ARISTAS poblaban los cielos, los mares y todo el universo cuyos poderes majestuosos asombraban a los hombres, los ARISTAS eran considerados como Dioses, pero solo Lord Chikaku era el más grande de ellos, considerado “Dios de Dioses” era un ser tan perfecto que dejaba sin palabras a la perfección misma, ellos habían creado el cielo el mar la tierra y el universo en conjunto con un espíritu llamado la Madre, se dice que Lord Chicaku existió desde mucho antes que todo en el universo, al pasar el tiempo los Aristas   no envejecían ni morían mucho menos se marchitaban con el tiempo, eran seres tan duraderos que dejaron de lado la reproducción y se resignaron a ser ellos por la eternidad.

Dejaron de lado la necesidad de generar más Aristas puesto que ellos eran suficientes para mantener el equilibrio, la doctrina familiar se reemplazo, con doctrinas de bien personal, los Aristas no dependían del sexo puesto que eran seres asexuales que vivían en comunión con la naturaleza, se dice que los Aristas más poderosos provenían de fuerzas titánicas entre la energía de la madre tierra y los elementos Físicos de la naturaleza, es decir, lluvias estruendosas, relámpagos ensordecedores, desde incendios forestales por el incesante calor del verano, son esos acontecimientos naturales que le dieron la vida a los Aristicos-originales que darían vida las próximas generaciones.

    Los Aristicos-originales poseían grandes amuletos que se reflejaban a través de círculos, triángulos o líneas verticales, cada forma geométrica reflejaba su posición o poder especial debido a que era un privilegio para aquel Arista que naciera con las tres cualidades de la simbología. Los triángulos representaban el alma, cuando el triangulo poseía un círculo alrededor quería decir que el ser que  había nacido en cuerpo y alma, es decir, fue engendrado por medio del sexo con otro ser no Arista, cuando el circulo del cuerpo nace dentro del triangulo refleja el nacimiento de un ser ni humano ni Arista, se le da el nombre de hijo de la madre tierra, normalmente este nace de grandes temblores o de inundaciones puesto que tener el cuerpo en el alma le da un estatus de respeto similar a la del Dios, aquel que nace con la línea entre los sellos del cuerpo y el alma, es el ser mas privilegiado puesto que la madre tierra lo dota con un poder ilimitado, sabiendo que puede ser inmortalizado por el hecho de poseer en sus manos el equilibrio de universo, el Dios Chicaku posee el sello del privilegio, aunque nadie sabe el origen de Lord Chicaku el posee el control sobre la madre y todos los sellos del cuerpo y el alma.

   Los Aristas al igual que los humanos fueron creados por la madre para que la acompañasen en la eterna soledad, poseían un respeto inigualable hacia la procreadora de la vida, los Aristas mas grandes se creían mejores que los humanos, debido a que al ser procreados por la carne y gozar del alma, no tenían el control del ser, es decir, los humanos eran tan capases como los Aristicos de hacer cosas maravillosas como cruzar los cielos volando y hacer llover en el desierto, pero estaban tan conformes con la vida que le proporcionaba el seno de la madre, que ignoraron a los Aristas y vivieron para reproducirse y esparcirse como los animales en la tierra, los Aristas siempre se refirieron a los humanos como animales rastreros, criaturas asquerosas que nacen del dolor que les causa placer, dicho placer que demuestran con las gustosas formas de comer la carne del otro, por el simple hecho de que gozan mas de comer la carne que alimentarse del alma como lo Hacemos los Aristas, los humanos no son dignos de la perfección...

     En los tiempos de guerra contra la Madre los humanos comenzaron a sentir la ambición, el odio y la intriga, Lord Chicaku solo pudo imaginarse que otra travesura de la Madre se estaba volteando en su contra, así que convoco a todos los Aristas y les dice<< ¡!Algo está pasando uno nuevo a llegado al plano material pero este no es como nosotros!¡>> Todos lo miraron y le sonrieron, en ese momento uno de ellos hablo << ¿Cómo dices? Tú crees que la Madre comenzó a expandir más hijos... pues no creo que se haya vuelto promiscua como hace mas de mil años...>> Exclamo lady Mixsukaku, todos la miraron y dijeron <<¿Sabes porque lo dices? Porque tú eres fruto de esa promiscuidad de la Madre>> Eso fue lo que Lord Chicaku le dijo con cierto recelo de no ofender, los demás callaron y le dejaron dialogar, en ese momento yo les dije <<La madre tuvo un hijo...>> Todos me vieron y me dijeron <<¿Quién eres?>> El estruendo se hizo tan prominente que no me importo para nada decirle que yo era el hijo de la madre <<Si...!! yo soy el hijo de la Madre... con un humano, toda esa discordia, todo ese odio es causado por mi ira contenida hacia todos ustedes>> Chicaku me miro con sus ojos de la perfección y me dijo<< Tu no matas a nadie>>. Yo le repelí la mirada y me desmaterialice, pero mi esencia estaba en todo el universo así que sabía todo lo que los Aristicos hablaban y planeaban, me molestaba tanto que se creyeran mejores que los humanos o los mestizos, puesto que los alejaban de las enseñanzas del alma solo por asco, peor a un, nos mantenían al margen de la Madre para que no conociéramos nuestros orígenes y por otro lado nos sometían al hecho de rendirles culto y toda clase de ademanes de alabanza para hacerlos sentir más superiores.

        El día en que nací fue cuando la Madre se materializo en hombre, un hombre alto esbelto de ojos con el color del universo, podía verse constelaciones enteras con el solo hecho de postrar la mirada en sus ojos, su cabello era tan amarilla cono el sol, con dientes tan blancos y relucientes como perlas del mar, su piel era tan blanca y tersa como la nieve, era un hombre tan perfecto que no parecía humano, dicho individuo se dirigió a la puerta de una humilde casa perdida entre bosque de rosetas blancas, allí encontró a la humilde joven, virgen de unos catorce años, esa joven era mi madre, una pequeña de ojos tan azules como el cielo, tenia mejillas tan rosas como los pétalos de la rosa virgen, era tan hermosa y prodigiosa que los padres físicos de la joven la alejaron de toda persona humana o Arista, pero no sirvió de nada, la Madre se hizo hombre para profanar el tesoro humano que empañaba su perfección así que tomo a la joven convenciéndola con su belleza tan Aristica, con su voz  tan tersa como la seda pero tan potente como el rayo, el hermoso hombre le prometió a la joven que le daría la belleza y perfección eterna, pero que solo tenía que darle algo a cambio.

      La joven prodigio de la belleza mas allá que la Madre misma, acepto la condición, la joven inocente fue abusara física y espiritualmente por aquel ser hermoso cuya intención no era darle la vida eterna si no llevarse la suya y consigo su pureza, durante horas el  dolor era la atmósfera de aquel idilio de decadencia y perturbación, no había sensibilidad alguna por aquella virgen, solo quería hacerla sentir dolor para que anhelara la muerte, le hizo tanto daño, que la joven quedo inconsciente en un charco de sangre, la cruel criatura infernal que muchos llamaron Madre creyó haber cumplido su objetivo así que se marcho de aquella casa, los rosales se marchitaban al paso de la criatura, los padres de aquella muchacha llegaron muy tarde, ya alguien había profanado su tesoro, prometieron que cualquier ser humano o espiritual que hubiese hecho tal cosa a su hija le darían la muerte así fuese lo último que hiciesen en sus pobres vidas de marginales.

     La joven sobrevivió pero lo que no savia era que en su vientre crecía la semilla de la Madre, mi madre no recordó lo que la madre le hizo solo recordaba que le dolía todo su ser, desde adentro, como si algo le desgarrara las entrañas. Ese algo era yo el fruto de la venganza el hijo de la Madre con la madre humana, el hijo del bien que haría el mal para demostrarle a la humanidad la maldad de la Madre.

     Luego del aborto la semilla seguía creciendo en el vientre de la joven hasta que un día los padre salieron de casa, mi abuela quería quedarse a cuidar de mi madre pero el abuelo necesitaba ayuda con la leña así que se marcho junto con él,  al rato de su partida comenzó a llover, pero no era una lluvia como todas, los relámpagos cruzaban el cielo, el agua penetro por el medio de la casa, todo a nuestro alrededor comenzó a temblar, se veía la forma tan potente en la que temblaba el suelo como si la tierra se fuera a abrir, era la Madre estaba retorciéndose del dolor, la ira la invadía al ver que las fuerzas de la naturalezas apoyaron mi causa, desde el vientre de mi madre humana pedí a todos los seres del mundo espiritual la fuerza para sellar a la Madre en la tierra... ellos me escucharon, pero había que hacer un sacrificio, era la vida de mi madre física para otorgarme un cuerpo humano... y así fue, al cesar los estruendos de la naturaleza, del cuerpo muerto de aquella  joven que había de ser mi madre, debía morir por una causa mayor a lo humanamente descrito, de allí emergió un bebe, los seres de la naturaleza se encargaron de asistir el parto y de inmortalizar el cuerpo físico de quien pereció para darle el fin a quien le causo el dolor de la muerte sin razón, era una muerte tan indigna aquel día en el que nací llore con tanta fuerza que la Madre perdió el control y quiso callarme con la lluvia, pero el espíritu de la naturaliza se apiado de mi e hizo que cuando mi llanto se escuchara que las lluvias aumentaran para que sintieran mi dolor y ahogaran a la Madre en mis lágrimas de sufrimiento, y que cuando cesara el rigor de mi riña la sequía acompañara mi soledad y que resecara los páramos desapareciendo los océanos en el calor abrasador del rencor que sentía por ella, pero que cuando lograse estabilizarme que bendijera a la humanidad con una primavera tan primorosa como la joven de la que provenía mi existir los espíritus me bendijeron con los poderes de la naturaleza haciendo un prodigio en poder y gloria solo me  faltaba crecer y ejecutar el plan maestro, para devolverle a la humanidad su libertad.

      Al llegar los abuelos vieron a la joven muerta en la pequeña cama en la que hacía tres días me había concebido, estaba intacta, se veía plena tan pura que aun después de la muerte parecía tan niña como siempre la abrían de recordar mis abuelos. Lloraron y junto con ellos los rosales muertos que espesaban a vivir gracias al espíritu de la naturaleza, ellos vieron al pequeño barón lo supieron por el tono del llanto, puesto que como ser espiritual mi asexualidad me caracteriza, no poseo ni pene ni vagina era algo inhumano puesto que no lo soy, el espíritu de la concordia le hablo a los abuelos, les dijo <<!¡he aquí el futuro de la humanidad, él es el hijo de la Madre con la madre humana!¡ Es un privilegio para ustedes el ser quienes  lo cuiden y eduquen, debido a que él es futuro de la humanidad, dependiendo de su criterio tanto como humano y Arista, cuiden de la criatura sin sexo solo ustedes pueden darle la educación humana,  por la espiritual no deben preocuparse ya que es nuestro deber el instruirlo...>>  mi abuelo acepto, la abuela también debido a  que era yo lo último que quedaba de la joven “luz” si  así se llamo mi madre ¡Luz!.

    El tiempo paso y comencé a crecer, mi cabello era blanco tan blanco que parecía nieve al caer, tan liso que al ondear con el viento parecían esporas a la deriva, las rosas blancas se volvieron mi atracción favorita, por que de algún modo me seguían a todos lados, los abuelos me educaron como humano y los espíritus como un Arista del sello con el alma dentro del cuerpo, con el detalle que en el ojo izquierdo la línea del privilegio cruzaba el sello completo, todos los espíritus estaban intrigados de ver que eran irregulares mis sellos de alma, cuando solo podía tener el sello de la naturaleza o el de (la Madre tierra) Por la circunstancia en la que nací, pero la abuela me contó un día en secreto de que mi madre no era hija del abuelo, si no que se había acostado con un hombre extraño que llego a la posada de sus padres, ese hombre era un Arista majestuoso según mi abuela... De allí proviene el origen de la joven perfecta, siendo esa mezcla la que genero la irregularidad de mi sello, eso quería decir que mi madre era un Arista mestizo de sello de cuerpo y alma, siendo la Madre mi padre procreador otorgándome el sello de la naturaleza del cuerpo dentro del alma y el sello de la madre tierra, eso me hacía mucho más fuerte que el mismo Dios Chicaku.

     No todos los Aristicos posemos el sello en los ojos, en la guerra se vieron tantos como se pudo muchos tenían el sello en amuletos físicos como en collares y en artefacto extravagantes. Yo lo poseo en los ojos al igual que los Aristicos-originales, al tiempo después de que nací en tres meses ya era un hombre de 20 años y un Arista majestuoso en el arte de crear y destruir, los espíritus me dotaron con toda clase de enseñanzas, mis abuelos me dieron herramientas para crecer entre los hombres, el momento había llegado, ya tenía la edad para salir de los rosales, mis abuelos estaban felices pero a la vez tan tristes ya que según ellos no me volverían a ver, yo les prometí que trataría de verles todos los días pero si no cumplía con mi promesa solo les asegure  que no los desampararía nunca.

    El espíritu de la concordia les agradeció a los abuelos por el trabajo bien hecho, como recompensa los bendijo con la virtud de la divinidad, se alimentarían del alma y serian seres espirituales como los de la naturaleza, es decir, serian parte de la concordia misma, concordia me vio a los ojos y me dijo  <<¡!Eres tan hermoso hijo mío!¡ Me dolería echarte al mundo donde la Madre te perseguirá hasta acabarte, pero te sellare el amuleto que todo el tiempo te ha protegido de la Madre>> concordia puso su mano espiritual en mi frente y  me sello un amuleto con la forma de sol para liberarme de toda energiza residual que causara la ira de la Madre por mi existencia en el mundo, durante mi estadía en la cabaña de los abuelos todos los espíritus con sus ademanes de sabiduría sellaron con amuletos todo a mi alrededor para callar los berrinches de la madre y calmar la desgracia en la tierra, los espíritus eran tan viejos que con el solo hecho de pedir silencio a la Madre la “Madre obedecía” sin armar alboroto, pero ellos sabían que de sus hijos era ella la mas caprichosa y vengativa.

    Durante mi vida en el mundo humano y espiritual nunca necesite de alimento, puesto que la concordia la naturaleza y los demás espíritus me mostraron como alimentarme de la energía del alma, no solo el alma que llevaba dentro de mi cuerpo Arista si no del alma de todo ser vivo. Con el tiempo empecé a madurar, los espíritus me hicieron emprender un viaje por todo el mundo, buscando respuestas aprendiendo de otros, fueron tantos lugares que no recuerdo con exactitud todos, desde desiertos a mares infinitos cruce en buscas de las respuestas, estuve 100 años en constante peregrinaje conociendo Aristas luchando por el bien aprendiendo de los humanos y de los espíritus originales y sus hijos  en toda la tierra , en esos 100 años la Madre nunca supo de mí al parecer se resigno a esperar el golpe en cualquier momento, en la tierra habían tanto como reyes como pobres, las personas más carentes abundaban como los granos de arroz en flor de cosecha, los ricos y afortunados solo querían tener mas y mas sin preocuparse por el prójimo, la educación humana que recibí de los abuelos indicaba que debíamos actuar en comunión para con el otro, no solo alimentarnos del débil y que cuando no pueda mas dejarlo en el olvido como aquel trapo sucio que no da para más.

    El espíritu de concordia un día de los largos sin fin del peregrinaje de los 100 años llego a decirme << ¿hijo serás tu quien derrote esto? Puesto que la verdad la única solución es dejarlos a atrás y vivir tu eternidad tranquilo>> Y la mire a los ojos y le dije <<Seré yo quien acabe con esto ¡seré el Dios de un mundo donde todos seremos iguales! desde Aristas hasta Humanos>> El espíritu de la Lealtad se pronuncio y dijo << ¡Bendigo tus palabras!, “Espero no me arrepienta por hacerte bendito a nombre de la lealtad”, ¡¡ Toda palabra que salga de tu boca con sinceridad te otorgara en el hombre y toso ser viviente su lealtad incondicional !! He aquí la bendición de la Lealtad>>

    Las palabras de los espíritus han sido “Mi aliento” desde que me aleje de ellos para seguir un camino el cual no seria para beneficio de la humanidad, sería mejor dicho para mí, puesto que un humano que mate por plastecer o por deporte no merece mi misericordia, no quiero la Lealtad de un ser que quiera bien para él y mal para los demás, es mejor darles la muerte y hacerles renacer como semillas del bien, pero los espíritus me dijeron que no era lo adecuado, yo les pedí que me dieran la oportunidad de acercarme al “Dios” ellos se exaltaron y me dijeron << ¿como puedes siquiera imaginarte acercarte a Chicaku sama? Él es el ser más poderoso en toda la faz de lo conocido y lo que aun no se revela en el plano material, ni nosotros logramos acercarnos a él por respeto a su poder>> Yo les replique << ¡¡No!! “respeto” ¡¡Es temor!! Ustedes temen al poder del Dios>> concordia se molesto y me dijo <<Cuida tu boca... No hables de mas puesto que te puedes arrepentir, al parecer has dejado de ser el niño hermoso de hace 100 años atrás>> Yo le dije a Naturaleza que podía controlar lo que fuera, puesto que me había separado de mi lado humano y ya era un arista sabio de más de 300 años, en años estelares que es el que determina nuestro tiempo cronologista de vida.

    Naturaleza me dijo <<Haz lo que quieras, pero te liberare del sello desde ahora estas solo>> Yo le dije <<Por mi está bien...>> Nos dimos la espalda y me aleje de los espíritus, me dirigí  a una cumbre tan alta que cruzaba el cielo, en la que me senté a meditar por siete años, invoque cuerpos humanos que habían muerto en la tierra los cuales habían sido Aristas sin la educación del alma así que les purifique e hice míos, cree una barrera con el poder de la tierra  alrededor del pico alto en el que estaba, la barrera se expandía de forma ovalada alrededor del diámetro del pico, expandiéndose desde el suelo hasta el cielo, eso me protegía de quien quisiese hacerme daño...

       Logre juntar mil cuerpos de los cuales solo veinte pasaron la prueba, los esparcí por el mundo haciendo mi santa voluntad, eran humanos de poderes Aristicos,  al esparcirse por la tierra introdujeron  mi doctrina de reforma en los pobres y débiles, creando guerras y discordias en contra de los grandes y poderosos, estaba cumpliendo con la bendición de la Lealtad, no paso mucho cuando en el plano espiritual mis iguales se acercaron a mi pasando las barreras de mí “Sello de Alma” La naturaleza estaba satisfecha puesto que la Madre pedía a gritos piedad a los espíritus, piedad que no podían concederle porque  ellos no eran responsables de tal daño físico que le hacían los seres humanos, quienes dispusieron  en tomar posesión de los campos, quemando talando estallando cada área virgen de la Madre estaba muerta en vida, puesta por sus propio hijos en la condición de aquella joven que pedía la muerte a causa de tal dolor que le hizo sentir.

     Naturaleza, Lealtad, Concordia y otros tres llegaron ante mí en el plano espiritual que pertenece a mi “Sello de Alma”, durante horas debatimos el perdón para la Madre, pero yo no acepte, Concordia me decía que el motivo por el que ellos me habían dejado vivir era para cambiar a la humanidad para encaminarla hacia el bien, pero que lo había olvidado según dijo Concordia, Naturaleza dijo que hiciera todo como mi criterio Aristico lo dictara, Lealtad estaba sorprendido, puesto que él me  había retirado la bendición pero aun así la gente me era leal, dijo que en mis manos estaba el destino de todo, de la Madre, de los Aristas y todos en el universo, pero concordia quiso sellarme, y no tuve más opción que sacarlos de mi plano espiritual, alejándolos mas y mas de mí...

     Me sentí traicionado por ellos, no podía creer como Concordia, la más respetada de mis educadores tuvo la osadía de querer sellarme en el plano espiritual, puesto que todo ser humano o Arista sellado en el plano espiritual no tiene oportunidad a reencarnar, y eso me enfureció...
     Mis cuerpos eran masculinos de sexo definido solo uno de ellos fue mujer físicamente, mis cuerpos físicos eran mis ojos y boca para transmitirle al mudo mi dolor,  de mis siete años en el plano espiritual tarde tres en encontrar mis cuerpos, luego emplee el resto en destruir a la Madre y luego a los Aristas que se interponían en mi camino, la Naturaleza, la Concordia y los demás espíritus se esparcieron por el mundo tratando huir de mi ira, los humanos a quienes en algún momento quise liberar se volvieron simples piezas en un juego de meza que yo mismos había credo, el mundo era mi tablero interminable y los Aristas originales mis adversarios...

      Desde que el mar cruzaba las costas hasta el último extremo en la tierra firme, mis cuerpos cumplieron mi voluntad, las guerras se hicieron parte del panorama las aguas claras de los ríos se tiñeron de  carmesí, los cielos se ennegrecieron por la ira de la Madre que en un contra ataque envío a su seres Aristicos  para acabar con la guerra pero lo que no sabían era que mis Personas se hicieron cargo de mostrarles la espiritualidad a lo humanos seleccionados, mis cuerpos fueron por el mundo reproduciéndose de forma atroz, para expandir la semilla de mi cuerpo y alma... en un abrir y cerrar de ojos en tres años la tierra estaba poblada de mis hijos, ya no quedaban humanos para instruir todos eran seres Aristicos los espíritus se indignaron y esperaban con ansias el séptimo año para declararme la guerra espiritual, lo que más dolía a los espíritus era que el “Dios” que tanto respetaban ¡O temían! no se anunciaba ni intervenía, dado el caso que los Aristas más puros perecieron en el campo de batalla a causa de la Madre aun así no se presentaba Chicaku sama, lo que rompía poco a poco los hilos que separaban el mundo espiritual del humano uniéndolo mas y mas... Yo estaba satisfecho, poco a poco me hice tan poderoso como Chicaku, mis hijos vivieron prósperos en la tierra matando y haciendo sufrir a la Madre, quien por toda la eternidad se debía de lamentar por habernos dado vida...

      Cuando logre acercarme los Aristas originales, me las ingenia para tomar el lugar de Kasumoto sama, era un Arista de sello de alma sin el cuerpo. Su rango era bajo pero era el consejero de lady Mixsukaku quien de cierto modo era un Arista original, poco a poco me fui metiendo en las largas conferencias penetrando en el mundo de los seres perfectos que al parecer les daba igual lo que pasase con la tierra,  eran seres tan engreídos que según ellos ni los propio Aristicos se asemejaban a sus talones, Kasumoto llega ante mi por medio de Utakata san quien era el cuerpo femenino que yo poseía.


Esta historia continuara...








Comentarios

La Belleza Y la Fantasía

CADA CABEZA ES UN MUNDO

¿Se puede vivir sin propósitos?